martes, 17 de julio de 2012

Silencio...

Ya no me duele.
Te sentía dentro de mi, desgarrandome por dentro.
Llegue a odiarte, a maldecirte...
Te metías en mis oídos destrozándome los tímpanos, 
tan solo gritando podía parar aquella tortura que un día tras otro me consumía.
Ahora por fin vuelvo a aceptarte...
Vuelvo a disfrutar de ti.
En las mañanas y noches, 
en los descansos,
en las esperas.


Que atronador puede resultar a veces el silencio...

2 comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...